Cómo evitar estafas al contratar un tour en Sudamérica

Si nunca has viajado por Sudamérica, es fácil dejarse llevar por fotos impresionantes y ofertas “imperdibles” que ves en internet. El problema es que, detrás de muchas, hay letras pequeñas que pueden arruinarte la experiencia: precios inflados, servicios que no existen o cambios de última hora sin previo aviso.

He visto a viajeros llegar emocionados y terminar frustrados porque lo que contrataron no era lo que les prometieron. En este artículo quiero compartirte lo que he aprendido organizando viajes por la región, para que sepas reconocer las señales de alerta y viajar sin preocupaciones.

El problema real: las letras pequeñas

Una de las quejas más frecuentes de los viajeros que llegan a mí después de una mala experiencia es: “No me dijeron que…”.

Puede ser que el tour incluya traslados, pero no te aclaren que son en transporte público. O que te vendan una experiencia “todo incluido” y luego descubras que hay pagos obligatorios en cada parada. Incluso he visto casos en los que el guía simplemente no aparece.

En lugares icónicos como Machu Picchu, las entradas se agotan meses antes. Y si alguien te promete disponibilidad inmediata sin explicarte cómo, desconfía.

Lo que puede pasar si no te cuidas

Te lo digo sin exagerar: una mala elección puede costarte dinero, tiempo y, sobre todo, momentos que no volverán.

He conocido viajeros que llegaron a Cusco con todo pagado, pero sin entradas a Machu Picchu. Terminaron esperando días en la ciudad para conseguir un cupo de último minuto… perdiendo tiempo y encareciendo el viaje. Otros han contratado excursiones “económicas” que terminan con buses inseguros o guías sin licencia.

Cómo protegerte: mis 5 reglas básicas

  1. Investiga más allá de las fotos
    No te quedes con lo que ves en redes. Busca reseñas en diferentes plataformas, pregunta en foros de viajeros y revisa si la empresa tiene presencia real (web, redes activas, contacto directo).
  2. Pregunta todo por escrito
    Horarios, tipo de transporte, qué está incluido y qué no. Si no te lo quieren dar por escrito o en un mensaje claro, cuidado.
  3. Desconfía de lo demasiado barato
    En Sudamérica, un precio demasiado bajo casi siempre significa recortes en seguridad, calidad o cumplimiento.
  4. Verifica licencias y permisos
    En destinos como Machu Picchu, el guía debe estar acreditado. Pide su número de registro.
  5. Reserva con anticipación
    Especialmente en sitios de alta demanda. Así evitas caer en manos de revendedores que inflan precios o te dejan sin cupo.

Una historia que nunca olvido

Hace unos años, una pareja me contactó desde Cusco: su tour “confirmado” a Machu Picchu se había cancelado la noche anterior. El operador les dijo que podían ir “por su cuenta” y comprar entradas allá… lo que en temporada alta es casi imposible.

En menos de una hora les conseguí un itinerario alternativo que incluyó un recorrido por el Valle Sagrado y el ingreso a Machu Picchu al día siguiente, sin que perdieran días ni pagaran de más.
Por eso siempre insisto: un buen plan no es solo el que te lleva al destino, sino el que prevé qué hacer si algo sale mal.

Un último consejo entre viajeros

Cuando contrates un tour en Sudamérica, no te quedes solo con el precio o la promesa. Piensa en quién va a estar pendiente de ti si las cosas no salen como esperas.

Para mí, organizar un viaje no es vender un servicio: es acompañarte antes, durante y después, anticipando problemas que quizás ni sabías que podían ocurrir. Así viajas con la tranquilidad de que, pase lo que pase, siempre habrá un plan.


¿Listo para viajar sin riesgos?

Si quieres recorrer Sudamérica sin preocuparte por estafas, horarios imposibles o letras pequeñas, escríbeme y diseñemos juntos tu itinerario.